Chile
Jueves 01 de Septiembre de 2016.- De acuerdo al último estudio de Sonami sobre el empleo en el sector minero, en junio se acentuó la caída en el empleo respecto de los números mostrados durante el mismo período del año anterior. En total en 12 meses se eliminaron 38.000 puestos de trabajo, pues en junio de 2015 los puestos alcanzaba 233.000, en tanto que en junio de 2016 registraron 195.000, según INE, esto es una disminución de 16.3%.,
Sonami explicó que si se compara el peak de ocupación en esta rama productiva, que se alcanzó en septiembre del año 2012, con 261.000 trabajadores, con los últimos datos entregados por el organismo estadístico, se observa que la ocupación en esta actividad económica ha disminuido en 66.000 trabajadores.
Junto a lo anterior, precisó que el nivel de empleo en la minería hoy es inferior en 6.000 trabajadores respecto de los registrados en marzo del año 2010, pues en esa fecha habían 201.000 ocupados en la minería, en tanto que el último dato entregado por INE alcanza a 195.000.
Al comparar la tasa de desocupación actual con lo que ocurría hace un año atrás en el país y particularmente en las regiones mineras, se observa que a nivel nacional la tasa de desempleo crece 0,6 puntos, en tanto que en Tarapacá aumenta en 1,9 puntos, desde 6% a 7,9%, en Antofagasta aumenta 1,1 puntos, pasando de 7% a 8,1%, en Atacama se incrementa 1,2 puntos, elevándose de 6,6% a 7,8% y en Coquimbo aumenta 1,1 puntos, desde 7,5% a 8,6%.
Álvaro Merino, gerente de Estudios de Sonami, señaló que precisamente las regiones del norte son las que registran las más altas tasas de desempleo en el país y "la contratación de trabajadores se manifestará con fuerza en el sector minero una vez que se reactive la inversión".
Merino añadió que considerando el efecto multiplicador de la inversión minera "debemos dar un impulso robusto a esta importante variable, a través de la agilización de permisos y más importante aun despejando la incertidumbre. En este sentido, como país debemos precisar, en forma nítida y clara, sin ambigüedades, la dirección a seguir para el desarrollo de Chile, lo cual, por cierto, generará un mayor grado de confianza respecto del futuro. Para ello por cierto, se requieren acuerdos amplios, en un horizonte de largo plazo, donde la estabilidad de las reglas es un factor crucial".