Chile
La compañía vendió todos sus activos al fondo de inversión estadounidense I Squared Capital, que invierte en el negocio eléctrico en distintos países y que pagará USD 1.200 millones por las centrales de generación y demás infraestructura que Duke opera en Perú, Chile, Ecuador, Guatemala, El Salvador y Argentina.
Miércoles 12 de Octubre de 2016.- La compañía eléctrica estadounidense Duke Energy salió finalmente del negocio energético en América Latina, desprendiendose de todos los activos que la empresa opera en Chile y América Latina.
La compañía informó que vendió todos sus activos al fondo de inversión estadounidense I Squared Capital, que invierte en el negocio eléctrico en distintos países y que pagará USD 1.200 millones por las centrales de generación y demás infraestructura que Duke opera en Perú, Chile, Ecuador, Guatemala, El Salvador y Argentina.
Duke Energy además informó que esta semana vendió sus activos en Brasil a la compañía china Three Gorges -que opera la central hidroeléctrica Tres Gargantas en su país- en USD 1.200 millones.
En febrero, Duke abrió un proceso para vender “todo o parte” de su negocio internacional, lo que concretó finalmente esta semana.
En América Latina, Duke Energy opera principalmente centrales hidroeléctricas, termoeléctricas a gas, líneas de transmisión y redes de gas natural. Su potencia instalada supera los 2.300 MW, de los cuales 380 MW están en Chile. En el país, Duke concentra sus operaciones en la Región del Biobío y sus activos están conformados por la Central Térmica Yungay -ex Campanario, que pertenecía a Southern Cross y Gasco-, además de las centrales hidroeléctricas Peuchén y Mampil del Complejo Hidroeléctrico Duqueco, adquirido a CGE en 2012.
En total, la generadora había invertido en Chile unos USD 500 millones sólo en compra de activos.
La operación forma parte de un plan de la empresa norteamericana de enfocarse en Estados Unidos, país donde es una de las tres generadoras más grandes. Allí, está entrando con fuerza en el negocio del gas natural.
En la operación, Duke Energy fue asesorada por Credit Suisse y JP Morgan. En el caso de Argentina, el cierre del negocio está sujeto a la aprobación de las autoridades antimonopolio.